domingo, 3 de noviembre de 2019

DOSCIENTAS TUMBAS MILENARIAS EN CHINA

Arqueólogos chinos han descubierto cerca de la ciudad de Chengdú doscientas tumbas pertenecientes a las dinastías Han y Wei-jin.


En los acantilados que se asoman al río Jinjiang, cerca de la ciudad de Chengdú, en la provincia de Sichuán, en el centro de China, el Instituto de Investigación Arqueológica y de Reliquias Culturales de Chengdú ha descubierto más de doscientas tumbas excavadas en las rocas, datadas entre 206 a.C y 420 d.C., durante los reinados de las dinastías Han y Wei-Jin.
Entradas de las tumbas

Con la dinastía Han, Chengdú se convirtió en el centro de una importante actividad económica basada en la producción de esmaltes, sedas y brocados, por lo que se dio el sobrenombre de Jincheng ("ciudad del brocado").

Tumbas opulentas

La importancia de Chengdú se plasma en las tumbas descubiertas. Se trata de sepulturas excepcionales, según los arqueólogos, tanto por antigüedad como por sus dimensiones, ya que algunas contienen hasta siete cámaras funerarias unidas por tuneles de hasta veinte metros de longitud. Aunque muchas muestran indicios de haber sido saqueadas en el pasado, de su interior se han recuperado unos mil objetos de oro, plata y bronce, que son testimonio de la riqueza de sus propietarios. 
El arqueólogo Pan Shaochi ha afirmado que los materiales descubiertos en este conjunto de tumbas son muy valiosos para la investigación arqueológica sobre este remoto período de la historia.